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Vol. 20. Núm. 7.
Páginas 36-43 (Julio 2001)
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EUGENIA GARRIDO
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Pilar Machancoses

Presidenta en funciones del COF de Valencia

 

El próximo 15 de octubre finaliza el plazo que el Gobierno le ha dado al COF de Valencia para presentar como mínimo las 500.000 firmas que la Constitución establece para que una ley de iniciativa popular para la farmacia sea debatida en el Parlamento. Desde finales del pasado año más de 4.000 fedatarios repartidos por toda España recogen firmas entre los ciudadanos. Pilar Machancoses, presidenta en funciones del COF de Valencia, entidad promotora de la iniciativa, ha hablado para Offarm sobre la evolución de este proyecto, las expectativas que ha despertado y los objetivos que persigue.

 

«Al farmacéutico se le ha enseñado a callar y aceptar resignadamente las decisiones de la Administración»

 

Cómo, cuándo, de quién y por qué surge la idea de la iniciativa legislativa popular sobre principios básicos de ordenación del medicamento?

Los farmacéuticos hicimos una huelga, el 11 de julio del año pasado, en protesta por el Real Decreto-Ley 5/2000. Aunque en Valencia se hicieron dos cierres, una manifestación y varios paros informativos de 10 minutos, la reacción del Consejo General de COF y del resto de colegios fue más bien tibia. Temíamos, y así ocurrió, que después del verano los ánimos se enfriaran y que el verdadero peligro (la salida de las EFP del canal farmacéutico) fuese una realidad en la Ley de Acompañamiento. Al farmacéutico, al que se le ha enseñado a callar y aceptar resignadamente las decisiones de la Administración, siempre le queda una sensación de impotencia.

De manera que decidimos intentar cambiar las cosas y actuar. Estamos convencidos de que nuestro modelo de farmacia es el mejor. Así que nos reunimos la Junta, los asesores y otros farmacéuticos y elaboramos los 6 artículos de esta ley. Nuestro deseo hubiese sido contar con más participación, pero nos aconsejaron mucho sigilo y discreción hasta que el texto llegase a la Mesa del Congreso.

Así ocurrió y el 27 de septiembre, después de cumplidos todos los trámites preceptivos y seguros de que el articulado no incurría en ninguna de las causas de inadmisibilidad, la Ley se presentó en el Parlamento.

 

A día de hoy, ¿cómo marcha la iniciativa? ¿Cuáles son las expectativas?

Hemos presentado la Ley en más de 30 provincias y nuestra intención es llegar al menos a todas las comunidades autónomas, no sólo a los farmacéuticos. En este momento, se están realizando reuniones en facultades, en las sedes de partidos políticos, asociaciones de amas de casa, de consumidores, etc. Por el ánimo con que nos reciben, las expectativas son magníficas.

 

¿Cuántas firmas se han recogido ya? ¿Cree que se alcanzarán las 500.000 exigibles para que la Proposición de Ley sea debatida en el Congreso de los Diputados?

A principios de mayo superamos las 300.000 firmas recibidas en el Colegio, pues en las farmacias todavía quedaban muchas por enviar. Estamos convencidos de que se superará con creces el medio millón.

Respuesta

¿Han recibido algún apoyo de otros estamentos farmacéuticos?

Hemos tenido de todo: colegios que nos han invitado a iniciativa propia, colegios que lo han hecho a petición de sus colegiados y colegios que nos han cerrado sus puertas pese a que una mayoría de sus colegiados les pedían que fuésemos a presentar la Ley. La razón es evidente: el promotor es el Colegio de Valencia. Si hubiese sido el Consejo General, nadie duda que la Ley se hubiese presentado en los colegios a bombo y platillo. El ejemplo lo tiene en que en esos mismos colegios que cerraban las puertas a la Ley de iniciativa popular se las abrían una semana después al Congral.

«Proponemos horarios y guardias iguales para todas las farmacias y un sistema de concertación general que las proteja de la tiranía de los convenios individualizados»

 

¿Cuál ha sido la respuesta de la sociedad ante la solicitud de su firma?

La sociedad está entendiendo perfectamente esta Ley. Habrá rechazos aislados pero, en general, los ciudadanos no tienen el menor problema en firmar. Y la razón es la confianza que les ofrece su farmacéutico. Una vez les explicas lo que quieren hacer con el medicamento y las nefastas consecuencias que traería la liberalización, lo comprenden, lo comparten y nos dan su apoyo.

 

¿Cómo valora la respuesta de los farmacéuticos? ¿Ha habido grandes diferencias porcentuales por comunidades autónomas?

Son contadísimos los farmacéuticos que han puesto alguna objeción a la Ley y aun en esos casos creo que se han convencido después. Valoran, sobre todo, que se trata de una iniciativa transparente y clara, que les permite ser activos en la defensa de su profesión y de la honestidad de su trabajo. El entusiasmo es una de las características de las reuniones, en las que se advierte que los farmacéuticos están cansados de la pasividad que ha caracterizado a esta profesión.

En cuanto a las diferencias que usted comenta, quizá por el número de provincias que comprende podríamos destacar del peso de Andalucía, pero en otras comunidades autóno mas nuestros compañeros están trabajando con igual ilusión.

Líneas básicas

¿Cuáles son las líneas básicas de la Proposición de Ley?

El eje sobre el que gira esta propuesta es la defensa del modelo mediterráneo de farmacia, que se ha demostrado como el mejor del mundo. Ese modelo se asienta sobre varios principios básicos, pero sobre todo por una profunda democracia: todos los ciudadanos, con independencia de su edad y su situación económica, social o geográfica, tienen el derecho a acceder al medicamento en iguales condiciones de precio, proximidad y calidad de servicio. La casi totalidad del articulado de la Ley va dirigida a reforzar esos mecanismos. Aunque esta ley va dirigida fundamentalmente a proteger el medicamento, no nos olvidamos de las oficinas de farmacia, que garantizan el cumplimiento de esa igualdad. Por eso proponemos horarios y guardias iguales para todas y un sistema de concertación general que las proteja de la tiranía de los convenios individualizados.

 

En la Proposición de Ley se aboga, entre otras cosas, por la necesidad de mantener el control de los precios en poder de la Administración ¿Esta medida será entendida y apoyada por todo el sector farmacéutico?

Todos estamos de acuerdo en que el medicamento no es un producto de consumo, sino un bien esencial para la salud de la población, y como tal debe ser tratado. Nuestra propuesta es que el Estado siga regulando los precios, que el medicamento tenga un precio justo para el laboratorio en el registro y que se haga una revisión anual del precio según el IPC.

 

¿Cómo encaja esta iniciativa dentro de la recién aprobada Ley Foral de Atención Farmacéutica de Navarra?

La Ley que nosotros proponemos defiende esencialmente al medicamento, pero no entra en las políticas de ordenación farmacéutica de las distintas comunidades, porque los gobiernos autónomos, desgraciadamente en este caso, no van a renunciar a su nivel de autogobierno. Sin embargo, estamos seguros de que si se aprueba esta Ley, la mayoría del contenido de la Ley Foral no podrá aplicarse. Navarra, por más que le pese al consejero Cervera, también es mediterránea a efectos de modelo farmacéutico.

Perspectivas de futuro

Cabe la posibilidad de que la Proposición de Ley sea debatida en el Parlamento, pero que lo que éste apruebe no sea la Ley que se ha elaborado desde el COF de Valencia. ¿Qué pasaría entonces?

Nunca ha pasado una cosa así en toda la historia del Parlamento español y no entendemos por qué hay personas empeñadas en decir qué pasará con esta Ley de iniciati va popular. No sólo es que no tendría ningún sentido, sino que existen mecanismos legales para que eso no ocurra. Los que opinan así confían poco en las instituciones democráticas, seguramente porque conocen poco la democracia. Cualquier partido tendría dificultades para explicar por qué rechaza esta Ley; de hecho, altos representantes del PP y del PSOE han reconocido que es difícil no estar de acuerdo con su contenido.

« Independientemente de su contenido, la Proposición de Ley ha permitido a muchos farmacéuticos levantarse y empezar a andar»

También cabe la posibilidad de que, a pesar de alcanzar las 500.000 firmas, el Congreso de los Diputados desestime la iniciativa. ¿Cuál sería entonces el siguiente paso?

Legalmente cabe esa posibilidad, pero el rechazo no lo recibiría ni el COF de Valencia ni los 4.000 fedatarios, sino los centenares de miles de ciudadanos que han dado su respaldo al proyecto. Esto hay que tenerlo en cuenta. Pero si las cosas no van como nosotros pensamos, el siguiente paso sería luchar, luchar y luchar por la farmacia. Ése será siempre el siguiente paso del COF de Valencia, con independencia de lo que ocurra con la Ley.

 

¿Cómo ve el futuro del sector farmacéutico entendiendo que caben tres posibilidades: que se apruebe la Ley íntegramente, que se negocie su contenido con sus promotores, o que se rechace íntegramente?

El futuro de la farmacia no tiene tanto que ver con la Ley de iniciativa popular, por muy impor tante que sea, como con la actitud que adopten tanto los farmacéuticos como sus instituciones en la defensa de sus derechos y sus legítimos intereses. Los farmacéuticos ya han hablado. Hablaron en la huelga del 11 de julio de 2000 y han seguido hablando en todas y cada una de las reuniones de presentación, asistiendo a los actos y haciéndose fedatarios. Y lo que dicen los farmacéuticos es que ya están hartos de callar y aceptar resignadamente los palos. Ésa es la realidad y creo que la causa de que estemos encontrando tanta oposición en determinadas instituciones.

«Navarra, por más que le pese al consejero Cervera, también es mediterránea a efectos de modelo farmacéutico»

Por último, ¿qué pueden esperar los farmacéuticos después de esta iniciativa?

Creo que nada será igual, porque algo va a cambiar en el mundo de la farmacia a partir de esta Ley. Independientemente de su contenido, la Proposición de Ley ha permitido a muchos farmacéuticos levantarse y empezar a andar, así como ilusionarse con un proyecto que les permite mantener la esperanza y hablar con la población de farmacia y de medicamentos con la cara bien alta, sin avergonzarse, porque están pidiendo algo para el beneficio de todos. Así que sólo por esta causa ya hubiese valido la pena el esfuerzo. *

 

 

 

 

 

 

Biografía profesional

Pilar Machancoses Andrés, que es la presidenta en funciones del COF de Valencia desde el pasado mes de abril, nació en la población valenciana de Alboraya, en 1941. Licenciada en Farmacia por la Universidad de Santiago de Compostela, está especializada en análisis clínicos y ortopedia. En la actualidad es titular de una oficina de farmacia en su población natal.

Desde hace más de 15 años, Pilar Machancoses es vicepresidenta del COF de Valencia. *

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