ENTREVISTA REALIZADA POR:
MARIÁN CARRETERO
Fotografías: Gonzalo Cáceres.
A pesar de todas las dificultades con que se suelen encontrar para desempeñar un cargo directivo en nuestro país, son cada vez más las mujeres que se incorporan a labores ejecutivas en el ámbito de la farmacia española. Es el caso de Maria Teresa Bassons, vicepresidenta del COF de Barcelona y miembro de la Ejecutiva de la Cámara de Comercio de la capital catalana. En la entrevista concedida a Offarm, Bassons nos informa de la transformación que ha experimentado durante los últimos años el colegio barcelonés y aborda algunas de las cuestiones más candentes del sector farmacéutico.
BIOGRAFÍA PROFESIONAL
Licenciada en Farmacia por la Universidad de Barcelona (1980), Maria Teresa Bassons es especialista en Farmacia Hospitalaria y premio nacional de la Sociedad Española de Nutrición Parenteral y Enteral (1986). Ejerce la profesión como titular de una oficina de farmacia ubicada en la localidad barcelonesa de Sant Feliu de Llobregat.
Además de desempeñar su cargo de vicepresidenta del COF de Barcelona, Bassons es vocal del Consejo de Colegios Farmacéuticos de Cataluña, miembro de la Ejecutiva de la Cámara de Comercio de Barcelona, de la Comisión de Promoción de la Salud y Prevención de la Enfermedad, del Consejo Asesor sobre Tabaquismo de la Generalitat de Catalunya, de la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria y de la Red Española de Atención Primaria. Asimismo, es directora de la revista Circular Farmacèutica y del Informatiu, las dos publicaciones que edita el COF de Barcelona para sus colegiados.
Ha sido directora, en las ediciones de 1995 y 1997, del Congreso-Muestra Infarma, una de las citas más importantes desde el punto de vista profesional y comercial del sector farmacéutico en nuestro país.
Maria Teresa Bassons
Vicepresidenta del COF de Barcelona
Hemos sabido defender la profesión e impulsar su desarrollo profesional y económico
Este año se celebran elecciones en el COF de Barcelona. ¿Cuál es su evaluación de la gestión de la Junta de Gobierno?
Creo que corresponde a los colegiados valorar la gestión de nuestra Junta de Gobierno, pero desde la perspectiva que da formar parte de ella, pienso que es una junta muy capaz, en todos los sentidos, de innovar, de impulsar la profesión. Y no sólo de plantear opciones de futuro, sino también de facilitar a todos los colegiados los instrumentos y recursos necesarios para que todos ellos, sea cual sea su ámbito profesional, hayan podido adaptarse a las necesidades que demanda la sociedad actualmente. Además, es una Junta de Gobierno bien liderada y sólida, que cuenta con un gran consenso a la hora de afrontar los grandes retos de la farmacia y la profesión farmacéutica en general. Asimismo, cuenta con grandes expertos que desarrollan una actividad muy intensa, con roles muy definidos, lo que permite que el COF de Barcelona sea en estos momentos, y en ámbitos muy distintos, un referente en todo el país. Creo sinceramente que nuestro colegio ha sabido defender la profesión e impulsar su desarrollo profesional y económico, ampliando también la oferta de servicios.
¿Qué aspectos han experimentado una mayor renovación en el colegio en los últimos años? ¿Cree que los colegiados perciben el cambio que prometía su programa?
Desde el punto de vista físico, es muy evidente el cambio positivo, consolidado con la adquisición de una sede propia. Era nuestra voluntad que los farmacéuticos de Barcelona dispusieran de un patrimonio propio, y hemos conseguido un colegio más abierto, acogedor y con mayor capacidad de dar servicio y respuesta a sus necesidades. Hemos intentado que el colegiado se sienta cómodo y participe en los programas de formación, así como en el resto de actividades profesionales y políticas del día a día, es decir, hacerlo partícipe en el devenir de su futuro profesional.
En cuanto a la estructura interna del colegio, se ha dado un importante impulso de profesionalización, con la incorporación de una gerencia que ha propiciado cambios que han permitido adaptarlo a las necesidades de los farmacéuticos. Hoy la estructura colegial está más preparada y ha conseguido dar un salto cualitativo, incorporando incluso estándares de calidad como las normas ISO.
Desde el punto de vista político y profesional, el colegio ha mostrado una actitud valiente, renunciando a refugiarse en el victimismo, evitando la confrontación sistemática y apostando por una política de pactos que nos ha permitido consolidarnos, y siempre con la voluntad firme de abrirnos a la sociedad. Debo decir que este momento se nos valora como expertos en temas sanitarios y del medicamento, y se reclama asiduamente nuestra opinión. Y se nos valora más gracias al esfuerzo individual y colectivo, ya que, por un lado, hemos tenido la capacidad de resolver de forma positiva nuestro futuro, y, por el otro, la sociedad ha observado y valorado esta transformación. Así pues, hemos cumplido, y en algunos casos superado, la mayor parte de iniciativas propuestas en nuestro programa electoral, aunque actualmente vivimos una etapa que continúa necesitando una Junta de Gobierno con este perfil para lidiar los cambios que aún se avecinan.
La mejor prueba del trabajo realizado es que, tras los numerosos ataques sufridos desde distintos frentes, el colectivo no sólo se ha mantenido sino que ha sabido renovarse, crecer y afianzarse. Tanto es así que a menudo otros profesionales nos preguntan cómo hemos conseguido conducir esta transición en la farmacia y mantener la confianza de los ciudadanos.
¿Cómo es la farmacia en 2004? ¿Cuál es su futuro?
Actualmente la farmacia se percibe como un centro sanitario con profesionales capaces de resolver problemas de salud relacionados no sólo con los medicamentos, sino también con sus hábitos y estilos de vida. A ello ha contribuido la adquisición de conocimientos y la incorporación de nuevas tecnologías, ámbito en el que somos pioneros. Gracias a ello, transmitimos una imagen de farmacia profesional, moderna y muy accesible. Un dato relevante a valorar es que en los últimos años se ha doblado el número de farmacéuticos en las oficinas de farmacia de Barcelona, y esto no pasa desapercibido por la sociedad. Hemos de continuar apostando por la profesionalización, sin dejar de lado aspectos más relacionados con la actividad comercial, la accesibilidad y la comodidad de los usuarios. Un paso todavía pendiente es salir del minifundismo de la oficina de farmacia y dotarla de una dimensión que nos permita disponer de espacios reservados para los ciudadanos que requieran confidencialidad y poder ofrecer mejor nuestros servicios.
En cuanto al futuro, no es fácil preverlo en un sector tan marcado por la legislación, las decisiones políticas y los muchos intereses que van en nuestra contra, pero soy optimista y creo que el actual modelo de farmacia, aun con los necesarios retoques, es el mejor modelo para los ciudadanos. A pesar de las ideas dogmáticas y de las embestidas constantes de signo liberalizador, los políticos que deciden sobre el modelo saben que los farmacéuticos no les creamos problemas y que damos respuesta inmediata a los ciudadanos. También valoran nuestra fuerza como colectivo. Aun así, en caso de que el sector se liberalizara, durante estos años hemos conseguido que las farmacias de Barcelona y de Cataluña tengan la capacidad de hacer frente a cualquier cambio en el modelo de farmacia.
Hemos conseguido que las farmacias de Barcelona y de Cataluña tengan la capacidad de hacer frente a cualquier cambio en el modelo de farmacia
¿Y cómo ve los otros ámbitos de la profesión?
Tradicionalmente, la oficina de farmacia ha sido el sector más activo y que más recursos genera para el colegio, pero también el que más dedicación requiere. De todos modos, en los últimos años se ha desarrollado una actividad muy intensa en otros sectores, por ejemplo, en farmacia hospitalaria, industria farmacéutica, farmacéuticos titulares o farmacéuticos analistas. En todos los ámbitos hemos estado atentos para promover y modular los cambios legislativos, ejerciendo una labor política y ofreciéndoles cada vez más servicios. Hemos escuchado sus demandas y hemos defendido sus intereses en los apartados en que tienen competencia exclusiva, propiciando que tengan la mayor capacidad profesional para competir con el resto de profesiones en aquellos ámbitos en que cuentan con competencias compartidas.
¿La atención farmacéutica es sólo una idea o se está aplicando en la práctica diaria de las oficinas de farmacia?
Pienso que las ideas, si no se pueden llevar a la práctica algún día, terminan en el olvido. En el caso de la atención farmacéutica, más que una idea creo que se trata de una actitud y de una forma de ejercer la profesión. El cambio de orientación del farmacéutico, que realiza no sólo la dispensación de medicamentos, sino el abordaje del paciente que toma medicamentos, es un cambio sustancial que ya se ha iniciado y que es imparable. Desde el COF de Barcelona somos realistas y hemos presentado un programa de atención farmacéutica posibilista que permite que cada farmacia pueda desarrollar, según sus necesidades, una distinta fase del programa. Nuestro objetivo es que la mayoría de farmacéuticos puedan, como mínimo, desarrollar la primera fase, a la que llamamos «dispensación activa». Se trata de un proceso lento pero necesario, en el que tenemos que conseguir implicar al resto de profesionales del sistema sanitario, trasladando al ciudadano el concepto de equipo.
En el campo de las EFG, los farmacéuticos hemos hecho una labor impagable dando mensajes de tranquilidad e informando rigurosamente a los ciudadanos
¿Qué opina sobre la implantación progresiva de los medicamentos genéricos en España?
Creo que las especialidades genéricas han cumplido ya el principal objetivo del Ministerio de Sanidad y Consumo cuando fijó su implantación en 2000, que no era otro que bajar el precio de los medicamentos, no sólo de las EFG, sino también el de los de marca. En Barcelona, en 2003, el porcentaje de EFG ha sido de un 11% sobre el total de recetas y del 8% sobre el total de la factura de medicamentos. Si a ello le sumamos los medicamentos de marca, que también han disminuido su precio hasta situarlo en el de referencia, el impacto de la factura de estos medicamentos respecto al global se acerca al 16%. Los farmacéuticos apostamos por las EFG contribuyendo a disminuir la factura de medicamentos en la sanidad pública, a la vez que hemos hecho una labor impagable dando mensajes de tranquilidad e informando rigurosamente a los ciudadanos. Comparando los datos con el resto de Europa, estamos todavía un poco por debajo de los países con una larga tradición en el consumo de medicamentos genéricos, aunque se debe tener en cuenta que en España no hay tanta diferencia entre los medicamentos de marca y las EFG, por lo que hay aún un cierto margen para crecer.
En cuanto a la reciente medida de bajar el precio de 2.070 medicamentos, aun cuando disminuya la factura en los próximos meses, no me parece una buena política para potenciar las EFG, ya que ha provocado que algunas industrias se replanteen la posibilidad de seguir fabricándolas; esto podría provocar un efecto rebote en la prescripción, con un deslizamiento hacia los medicamentos más innovadores.
¿Qué nuevos servicios debe ofrecer la oficina de farmacia actual?
Las farmacias han entrado ya en aspectos de competencia profesional, aparte de la competencia comercial, que sigue existiendo pero que es poco factible en un sistema planificado y ordenado. Cada vez más, las oficinas de farmacia ofrecen nuevos servicios a los ciudadanos, que cada una de ellas debe definir, rompiendo con el tópico de que todas las farmacias son iguales. Si bien es cierto que existe un mínimo garantizado en cuanto a la dispensación y asesoramiento en medicamentos, que supone la esencia de nuestra profesión y la mayor parte de nuestra actividad y de nuestros ingresos, ofrecemos, cada vez más, servicios adicionales, como el servicio personalizado de dosificación (SPD) o programas de cribado, de promoción de la salud, de farmacovigilancia o de alimentación, que cada farmacia desarrolla en función de sus capacidades e intereses.
Nuestro colegio está desarrollando programas para que los farmacéuticos que ofrezcan estos nuevos servicios lo hagan con rigor científico y con unas pautas de compromiso hacia el ciudadano. En definitiva, que ofrezcan un servicio de calidad que cuente con unos procedimientos establecidos y homologados que faciliten su posterior evaluación.
El ahorro en el gasto público de medicamentos es un objetivo primordial del Gobierno. ¿Cuál es su visión de la política aplicada? ¿Cómo podría lograrse una disminución de este gasto?
Una vez más, la reciente disminución en el precio de determinados medicamentos es una medida coyuntural que no soluciona el problema de fondo del Sistema Nacional de Salud. Es necesaria una mayor inversión en atención primaria para que el medicamento no sea siempre el recurso más fácil. Porque la verdad es que se aplica una visión política de objetivos a corto plazo, que no aborda el gran problema de nuestro sistema sanitario: la poca inversión realizada en relación al PIB global, un 5,36%; es decir, somos el quinto país con menor inversión de la Unión Europea. También es insuficiente la inversión en atención primaria, y es necesario un pacto estatal para asumir reformas estructurales, introduciendo cambios a todos los niveles, desde el prescriptor al ciudadano. Por último, se debería revisar el tipo de aportación del ciudadano, que podría ser más equitativo y potenciar listas positivas, primando la prescripción y dispensación de los medicamentos que demuestren un mayor equilibrio entre efectividad y eficiencia. Todo ello debería cimentarse en el desarrollo de políticas de prevención y promoción de la salud, que son económicas y contribuyen enormemente a disminuir los requerimientos sanitarios, tanto hospitalarios como terapéuticos. *
Respuestas sobre...
Mujer directiva, la asignatura pendiente
Más de la mitad de los miembros de la Junta de Gobierno del COF de Barcelona somos mujeres
Usted forma parte de Comité Ejecutivo de la Cámara de Comercio de Barcelona. ¿Qué actividades relacionadas con la farmacia desempeña esta institución y qué servicios ofrece a los farmacéuticos colegiados?
Tengo el privilegio de pertenecer al pleno de la Cámara de Comercio gracias al apoyo de los titulares de oficina de farmacia de la demarcación de Barcelona, desde donde posteriormente me eligieron para formar parte de la Ejecutiva. Desde aquí desarrollo, principalmente, una labor: hacer que se conozcan mejor las oficinas de farmacia en su vertiente económica y comercial, ya que debemos tener presente que también somos microempresas y es importante que nos escuchen los otros sectores económicos. Actualmente ya contamos con farmacéuticos en algunas de las comisiones de trabajo, concretamente en las de comercio, autónomos y salud. Estar en la Cámara de Comercio de Barcelona también nos ha permitido establecer contactos políticos. En cuanto a los servicios, gracias a un convenio de colaboración podemos ofrecer gratuitamente a nuestros colegiados cursos de ofimática y de nuevas tecnologías, así como otros servicios más vinculados al ámbito comercial y de formación.
Es obvio que la mujer es muy importante en la profesión farmacéutica. ¿Qué valoración hace de este hecho? ¿Es relevante la incorporación de mujeres a los cargos directivos de la Cámara de Comercio de Barcelona?
En nuestro colectivo, el 70% somos mujeres, y la personalidad femenina se traduce en la manera de desarrollar nuestra profesión. Nuestra incorporación a cargos directivos es un reflejo de este dato estadístico, del que encontramos un claro ejemplo en el COF de Barcelona, donde más de la mitad de los miembros de la Junta de Gobierno somos mujeres. En la Cámara de Comercio de Barcelona sólo somos tres mujeres de un total de 69 miembros, lo que atribuyo al hecho de que en el ámbito empresarial y económico la incorporación de la mujer se está produciendo más lentamente. Debemos trabajar mucho y no bajar nunca la guardia, porque la sociedad nos exige todavía más que a nuestros compañeros. Por si esto fuera poco, es difícil encontrar el equilibrio que nos permita conciliar nuestra vida profesional y personal, para lo que resulta fundamental mantener una actitud positiva, aceptar renuncias personales y contar con el apoyo de los que te rodean.