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Vol. 20. Núm. 5.
Páginas 181-183 (Mayo 2001)
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a Consultor farmacéutico. Miembro externo del Comité Europeo de Cosmetología (Bruselas).
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Las fragancias de la cosmética (I). Los ingredientes aromáticos

La mayoría de los productos cosméticos incluyen en sus fórmulas componentes aromáticos que en ocasiones enmascaran olores poco satisfactorios y con frecuencia aportan atractivas sensaciones olfativas.

Simultáneamente, y con una gran importancia económica, existe un mercado de perfumes y colonias en el cual la sabia mezcla de los ingredientes aromáticos es la clave del éxito.

La mayoría de estos ingredientes se incluyen en la primera actualización del inventario de ingredientes utilizados en los productos cosméticos hallándose ordenados alfabéticamente en la denominada Sección II, que corresponde a los perfumes materias primas aromáticas.

Esta sección fue adoptada durante la sesión plenaria del SCCNFP celebrada el 24 de octubre de 2000.

En realidad se conocen cerca de 10.000 moléculas aromáticas, la mayoría de las cuales teóricamente podrían ser interesantes para la formulación de perfumes, colonias y productos cosméticos. Pero la práctica ha limitado drásticamente este número y la industria solo utiliza unos 3.000 ingredientes aromáticos, de los cuales entre 300 y 400 son de origen natural.

Es evidente que la síntesis química aporta el 90% de los ingredientes aromáticos existiendo varios motivos para que se haya producido esta situación: un coste de obtención más favorable, la pureza que se puede alcanzar en los ingredientes de síntesis, su control analítico más facil, y por último su mejor compatibilidad química en el momento de realizarse la mezcla de los ingredientes que precisa la composición perfumante.

La mayoría de las fragancias naturales tienen un origen botánico, pero existen unas pocas excepciones que proceden del reino animal (musk, ambergris, civet y castoreum).

Algunos de estos ingredientes naturales pueden ser exudados provocados artificialmente mediante escisiones en la corteza de determinados árboles, a los cuales se conoce como bálsamos: de Perú, de Tolú, storax, gálbano, mirra, etc.

Muchas plantas acumulan en ciertos órganos los denominados aceites esenciales, llamados también aceites volátiles, obtenidos generalmente mediante diferentes procedimientos físicos (destilación, expresión, maceración, extracción). Las partes de la planta más ricas en ingredientes aromáticos son las flores, las hojas, las maderas, las raíces, etc. En otras ocasiones, la extracción se realiza mediante disolventes que posteriormente serán sometidos a evaporación: el ingrediente obtenido se llama concreto, pero se reserva el nombre de absoluto cuando el disolvente es alcohol.

Cualquiera de estas fragancias naturales contiene centenares de moléculas aromáticas diferentes, de las cuales sólo unas pocas son mayoritarias, mientras que las restantes están presentes en cantidades muy reducidas. Esta enorme complejidad crea problemas analíticos cuando se intenta conocer los componentes minoritarios presentes en la fragancia, y explica por qué su presencia en una composición de perfume puede crear incompatibilidades químicas difíciles de resolver.

La formulación de los ingredientes aromáticos es compleja, y generalmente se halla en manos de especialistas, ya que el producto cosmético más concentrado, el perfume, es el resultado de una mezcla creativa en la cual pueden hallarse hasta 300 ingredientes aromáticos. Este es un caso que debemos considerar extremo ya que muchos perfumes contienen uno 60 ingredientes aromáticos, la mayoría fruto de la síntesis química.

Las diversas fases olfativas por las que pasa la elaboración de un perfume requieren un triple acierto: en la «nota de salida», en el «cuerpo» que se debe apreciar después de 5-20 minutos, y en la «nota residual» que debe desaparecer gradualmente. Este comportamiento requiere la presencia de ingredientes conocidos como «fijadores», entre los cuales destacan el bálsamo de Perú, el bálsamo de Tolú, el musk, la cumarina, el storax, etc.

El elevado coste de los perfumes en parte es debido a su alta concentración en ingredientes aromáticos (hasta un 20%) y explica la mayor aceptación de formulaciones más diluidas, como son eau de toilette (5-8%) y colonia (2-5%). La mayoría de estas formulaciones exclusivamente perfumantes son soluciones alcohólicas (entre el 70 y el 96% de etanol).

Los ingredientes aromáticos también se incorporan a la mayoría de los productos cosméticos, en ocasiones para enmascarar el olor de algunos ingredientes de la fórmula, y en otros para dar una imagen olfativa atractiva para el consumidor. En ciertos casos se presentan interacciones químicas y olfativas de difícil solución.

La mayoría de los productos cosméticos contienen ingredientes aromáticos cuya concentración puede variar entre el 0,1 y el 4%. Por término medio, el contenido en perfume de la mayoría de las formulaciones se sitúa en el 0,5%.

Desde hace unos años se están realizando estudios estadísticos destinados a conocer cuáles son los ingredientes aromáticos presentes con mayor frecuencia en los productos cosméticos y de higiene, e incluso se han realizado comparaciones entre el mercado de Estados Unidos (400 productos analizados) y el de Europa (300 productos analizados).

Los ingredientes que parecen ser los más utilizados a ambos lados del Atlántico se relacionan en la tabla 1.

 

Destaca el hecho de que no se encuentra ningún aceite esencial, obtenido del reino vegetal, entre los 25 ingredientes más utilizados en América y Europa.

Simultáneamente, una revisión somera de los ingredientes presentes en la Sección II del Inventario, donde se reseñan exclusivamente los que se utilizan en los perfumes y como primeras materias aromáticas, nos indica la presencia de 628 entradas que corresponden a productos naturales cuya composición puede ser muy compleja, y de hecho solo se conoce parcialmente.

La inmensa mayoría de estas entradas corresponden al reino vegetal, y destaca para ciertos géneros las numerosas especies utilizadas, así como las distintas partes de la planta y el tipo de extracción realizado. Como ejemplo de la precisión alcanzada para establecer la «denominación común» que se utiliza como nombre de entrada, en la tabla 2 se muestran los 26 ingredientes naturales que corresponden al género Cinnamomum.

 

Merece destacarse la presencia de diversas variedades o subespecies de una misma especie, así como las diferentes partes de la planta utilizadas como material extractivo y la identificación de oil con el aceite esencial obtenido, mientras que la palabra extract en perfumería corresponde a la extracción con solventes que posteriormente serán evaporados (conocidos como concretos o absolutos).

La Sección II del Inventario de Ingredientes Cosméticos reúne exclusivamente los ingredientes aromáticos utilizados en perfumería alcohólica, y también los ingredientes que forman parte de perfumes destinados a enmascarar o mejorar el olor de los productos cosméticos que normalmente se formulan con los ingredientes que figuran en la Sección I del Inventario. A pesar de esta distribución, en la Sección I están presentes decenas de moléculas aromáticas (figuran en la Sección II) y numerosos aceites esenciales de plantas que poseen una indiscutible función perfumante. Esta situación aparentemente anómala está justificada porque se trata de ingredientes a los cuales se les atribuye una función cosmética diferente, con lo cual se sustenta la existencia de una aromacosmética. Por tanto, existen duplicidades entre ambas secciones, aunque en ocasiones ingredientes aromáticos de la Sección I indican que poseen la función masking (enmascaradora, destinada a reducir o inhibir el olor básico del producto cosmético). Algunos ejemplos de ello se muestran en la tabla 3.

 

Al igual que los aceites esenciales, muchas moléculas aromáticas se pueden hallar simultáneamente en ambas secciones del Inventario, pudiéndose comprobar que las funciones indicadas en la Sección I permiten su inclusión en las formulaciones cosméticas con una finalidad generalmente ajena a la del perfumado.

A modo de ejemplo, en la tabla 4 se han seleccionado unas cuantas moléculas aromáticas cuyo empleo ya es clásico en cosmética. *

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