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Conceptos básicos de dermofarmacia
Recibido en octubre de 2006
Entre los productos hidratantes activos se encuentran un grupo de compuestos denominados humectantes, sustancias higroscópicas que poseen la propiedad de absorber agua del ambiente. La razón principal por la que se añaden humectantes a las cremas cosméticas, especialmente las del tipo O/W, que tienden a perder agua por evaporación, es la de disminuir la desecación por exposición al aire de la película de crema que permanece en la piel tras la aplicación, hecho que influye al mismo tiempo en el estado de la piel, pues el humectante actúa como un emoliente, ayudando a conservar el grado de humedad originada por la transpiración. Se contrarrestan de este modo los efectos adversos de ciertas condiciones ambientales, como viento, frío o sol, causantes de sequedad, descamación, grietas, etc.
Humectación e higroscopicidad
La higroscopicidad es un concepto que hace referencia a la capacidad de ciertas sustancias para retener y liberar agua en función de la humedad relativa del ambiente. Sin embargo, un buen humectante no deberá ser nunca una sustancia en exceso higroscópica, ya que esto iría en detrimento de su capacidad para estabilizar el contenido acuoso. La explicación a este hecho es la siguiente: una sustancia altamente higroscópica tenderá a retener abundante agua en una atmósfera húmeda, pero si el contenido de humedad disminuye, cederá el agua retenida rápidamente. Es más, en condiciones de piel xerósica puede incluso aumentar la sequedad de la piel por captación de agua presente en el estrato córneo.
Esta sensibilidad a las fluctuaciones de humedad atmosférica se contrapone a las características que debe tener un buen humectante, ya que debe ser capaz de estabilizar la humedad del sustrato alcanzando un equilibrio dinámico con la humedad relativa ambiental.
Además de la higroscopicidad, hay otros criterios a tener en cuenta, como los que se muestran en tabla 1 en referencia a las características del humectante ideal.
Tipos de humectantes
Los humectantes se clasifican en tres grupos:
* Inorgánicos.
* Metalo-orgánicos.
* Orgánicos.
Son estos últimos los que presentan capacidad hidratante y, por tanto, los más comúnmente empleados en formulación cosmética. Se relacionan en la tabla 2.
Bibliografía general
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