Flashback
El año 2003 ha sido pródigo en noticias relacionadas con la oficina de farmacia. Entre las positivas, cabe recordar la modificación del RD 5/2000, gracias a la cual los medicamentos con precio de venta de laboratorio superior a 78,34 euros se excluyen de la escala de deducciones. Esta modificación ha corregido, por fin, una situación de injusticia manifiesta, pues el 5/2000 estaba penalizando económicamente a las farmacias que dispensaban las especialidades en cuestión a sus clientes.
En los últimos meses hemos asistido, también, a la revocación, por inconstitucionalidad, de la prohibición de transmisión de las oficinas de farmacia, vigente en Extremadura y Castilla-La Mancha.
Otra noticia positiva para nuestro colectivo la constituyó el cambio de opinión de Sanidad en relación con las bonificaciones. Finalmente, ganamos esta batalla absurda que ponía en cuestión la legalidad y legitimidad de una práctica comercial transparente, desde todos los puntos de vista.
Y ya en diciembre, ha conseguido ver la luz el Formulario Nacional, obra largamente esperada que nos permitirá --¡ya era hora!-- protocolizar la elaboración de fórmulas magistrales y preparados oficinales.
Hasta aquí, la cara de la moneda. En la cruz, encontramos la aprobación, tras el verano, del nuevo sistema de precios de referencia, cuyo impacto económico en el sector de oficinas de farmacia se estima, según un estudio efectuado por la Fundación CFN, en colaboración con el Colegio de Farmacéutico de Valencia y la FEFE, en 563 millones de euros anuales. Sus repercusiones en el trabajo diario del farmacéutico tras el mostrador las conoceremos ya en los primeros días de 2004.
Asimismo, en la sombra cabría situar el desbocamiento de la factura farmacéutica pública, que un año más, no ha logrado mantenerse en los límites fijados por el Gobierno.
Como siempre, una de cal y otra de arena. Ahora, sólo cabe esperar que el año entrante nos depare más noticias positivas que negativas y nos permita seguir trabajando en favor de la salud y el bienestar de nuestros conciudadanos sin demasiados sobresaltos.
Feliz Navidad.